(Después de esta escena en la que Carmina hija, y Urbano hijo se plantean estar juntos y besarse a pesar de que los padres de ellos no quieran, estos dos vuelven a tener una conversación más profunda y dejando las cosas claras y, también, planear un futuro juntos)
Carmina hija. Bueno, y mi pregunta es, ¿Qué será de nosotros si no tenemos estudios y tenemos una vida tan pobre? No quiero imaginarme que nos tengamos que quedar en esta pobre vecindad con esta escalera y este tipo de personas, sería un sin vivir, Urbano.
Urbano hijo. Es una pregunta difícil de contestar, tal y como está la cosa hoy en día es muy complicado tener una vida de lo más normal y más, si ninguno tenemos estudios.
Por lo pronto, nos casaremos y nos quedaremos aquí, en este vecindario durante unos años. Mientras, durante esos años, nos prepararemos una buena carrera y cuando encontremos trabajo, independizarnos y tener una familia numerosa. ¿Qué te parece?
Carmina hija. Me parece una muy buena idea. Siempre he querido estudiar y ser lo que desde pequeña me gustaba ser, psicóloga, pero sobre todo, tener hijos.
ACTO CUARTO:
(Ya han pasado 20 años. Carmina y Urbano se han casado, han abandonado la escalera ya que todos los demás de allí han fallecido y los pocos que quedan están a punto de caer, también, están trabajando en una empresa y tienen dos hijos. Manolín, ya es adulto y, también está contratado en esa empresa)
Manolín: Buenos días, señor.
Urbano. Buenos días.
Manolín. ¿Me podría decir dónde se encuentra su hija Marta, por favor?
Urbano. Pues, afortunadamente vas a tener suerte. Se encuentra en casa, hoy no hay universidad y está allí cuidando de su hermana.
Manolín. Perfecto, en cuanto termine de trabajar me pasaré por allí, tengo algunas cosas que comentarle.
Urbano. De acuerdo.
(Manolin llega a la casa de Marta, esta es una jóven de unos 18 años y bastante atractiva con un parecido realmente igual a su madre)
Marta. Hola, Manolillo. ¿Tú por aquí..?
Manolín. ¿Pues no me ves..? (Lo dice con picardía), Venía a hablar sobre lo que pasó el otro día en el pub, no paro de darle vueltas a la cabeza... Supongo que todo depende de tu decisión, yo... yo... y... yo te quiero...
Marta. Necesito tiempo, Manolo, he salido de una relación bastante seria hace unos meses y no estoy preparada para otra más, lo pase realmente mal...
Manolín. Tranquila, te entiendo perfectamente. No voy a insistir mucho, sólo que podríamos seguir quedando de vez en cuando hasta que te aclares y cuando te aclares, hablamos con tranquilidad, ahora tengo que irme.
Marta. Está bien, esta tarde nos vemos donde el otro día a las 7, adiós, Urbano.
Manolín. Vale, chao.
(Tras ocurrir esto, Marta habla con sus padres y les cuenta todo. Sus padres la apoyan y piensan que Manolín sería un buen partido y que podría llegar a enamorarse de él. Ya son las 5, Marta comienza a prepararse mientras sus padres están en el salón a solas y hablan sobre este tema)
Carmina. Pensándolo bien, si a los dos les va bien juntos, tendrían un buen futuro. Me alegra mucho saber que Marta haya vuelto a conocer a una persona tan buena después de todo lo que sufrió con su anterior pareja, ¿no crees, Urbano?
Urbano. La verdad, es que llevas toda la razón, Carmina.
Marta se merece un tío en condiciones, con las casas claras, un buen trabajo y que la quiera, y creo que ya ha llegado, Manolín sería su pareja perfecta.
Carmina. ¡¡Maaaaaaarta!! ¡Date prisa, vas a llegar tarde!
Marta. Espera, uf. No me agobies que me pongo más nerviosa de lo que estoy, mamá.
Carmina. No te pongas nerviosa, tienes las cosas claras que es lo que importa, todo saldrá bien.
Marta. Ya estoy lista, me voy, cuando llegue os llamo para ver donde estáis.
Urbano. De acuerdo, hija. Un beso.
(Marta llega, está algo nerviosa, intenta relajarse y se sienta a su lado)
Marta. Hola.
Manolín. Hola, ¿quieres pedir algo?
Marta. Mmm, sí. Una coca cola, por favor.
Manolín. ¡Camarero! Una coca cola para esta joven, por favor.
Marta. Bueno, he estado pensando y también lo he consultado bastante.
No me gustaría empezar ya una relación, después de la última me vas a tener que demostrar lo bastante para empezar en serio. Lo pasé realmente mal, incluso, llegue a coger depresión y creo que no me merezco eso. Pero podríamos seguir conociéndonos, tu sigues en la empresa de mi padre y yo en la universidad, con el tiempo todo se irá viendo.
Manolín. Me parece perfecta tu decisión. Me importas mucho, Marta, concéntrate en sacarte bien la carrera, yo sigo en la empresa de tu padre, y con el tiempo todo se aclarará.
Marta. Espero que me vaya bien y pueda sacarlo todo adelante, en 4 días tengo un examen bastante importante y lo tengo que aprobar. ¿Sabes sobre economía, no?
Manolín. Es obvio que sí se, y ademas, se me da bastante bien. Podríamos quedar una tarde y así ayudarte, ¿quieres?
Marta. Claro que quiero, tonto. ¿Te viene bien mañana a las 5?
Manolín. Perfecto.
Marta. Bueno Manolín, me tengo que ir, mis padres me esperan. Gracias por entenderme y querer echarme una mano con economía.
Manolín. No las des, es lo mínimo que haría por ti.
Marta. (Sonríe) Adiós.
Manolín. (También le sonríe y se vuelve a despedir con un gesto)
(Los dos se besan)
TELÓN Y FIN.
No hay comentarios:
Publicar un comentario